Mi rata de héroe

"¡Oh qué gran despertador de almas é instigador de energías es el dolor! Comparables a enjambre de marinos noctilucos, cuya fosforescencia se exalta al choque de la hélice del navío, las perezosas células cerebrales sólo encienden su luz bajo el látigo de las emociones penosas"
Ramón y Cajal

Estoy harta de ver casos de padres corajes que emplean hasta el último minuto de sus vidas para proporcionar un futuro mejor a sus hijos, pero el caso de  Wang, me ha vuelto a poner los pelos de punta, me magnetizan estas historias, y mi cuerpo segrega endorfinas, gracias señor Wang, por hacer reaccionar a mi moribundo y ajado cuerpo, y alimentarlo de estos opiáceos con efecto analgésico.
“El hombre ha pasado cerca de dos décadas viviendo bajo tierra, con una tapa de alcantarilla como única puerta, para poder ahorrar dinero con el que pagar la educación de sus hijos.”
El varón fue multado por violar la política del único hijo, al ver que las deudas le desbordaban, emigro a Pekín y redujo sus gastos hasta instalarse en una alcantarilla para poder costear los estudios a sus hijos, tiene tres, no me imagino una rata más digna que mi héroe chino, donde todo a su alrededor, durante casi largos veinte años, fue oscuridad y penumbra, todo era nauseabundo, fétido, maloliente, hediondo.
  no podría haber una rata más digna, un vertedero más pulcro, una cloaca más linda, que la construida por mi héroe ,mi titán mas anónimo que aquel que es capaza de sobrevivir a las apestosas e infectas razones que llevo a el señor Wang a taponarse la nariz y comer estiércol, para poder costear los estudios de sus hijos.
Mientras el restos de los mortales nos lamentamos por el mínimo sacrificio que nos pide el pariente más lejano, el vecino del quinto, el amigo desahuciado, Wang pasaba sus setecientos treinta días con su noches en una alcantarilla, llena de decencia,
Seguramente, este ciudadano, pasará sin pena ni gloria por la historia de este país, nadie le levantará una estatua, ni pondrán una calle a su nombre, seguramente, recordaremos a los hombres que conquistaron naciones a pesar de las carreteras hechas de cadáveres, un Hitler un Maho…serán recordados, el señor Wang, pasaran al fracaso del olvido, a la indiferencia más cruel, a la desgana del inapetente.
Quiero rendir mi gran homenaje al señor Wang, ese cíclope gigante de un solo ojo en medio de la frente, capaz de retar a las adversidades más francas, de esas que ya no acostumbramos a ver, demasiadas interferencias, si fuera por mí, lo nombraba presidente, un hombre capaz de oler mierda literal por sus hijos, a cambio de nada, es capaz de gobernar un país, no me cabe la menor duda, Xi Jinpin debería revisar sus ministros, es solo una sugerencia, convendría nombrar al señor Wang presidente, que tonta, no me acordaba, el gobierno chino tiene menesteres más importantes, como crear una nueva ley por la cual los ciudadanos estarán obligados a registrarse con sus nombres reales para tener acceso a Internet, no vaya a ser que se les escape más de lo debido y sus amordazados cuerpos tengan que hacer noche en una alcantarilla.